Te miro a los ojos y me pregunto de qué color serán tus sueños,
si son rojos o amarillos o azules como los míos.
Nos gustaba parar la ciudad dejando colgar los pies desde algún rascacielos
y romper los tópicos
a mordiscos.
Eh, estás temblando y no es de frío
pero no te engañes, la luna no es romántica.
Es un queso amarillo que riegan algunos enfermos
.y algunos poetas.
No es fácil prostituirse en un mundo lleno de esquinas
y de falsos carpe diem escritos con rabia en la pared
Aprendimos a ser fuertes a base de chupar limones
Trepamos a los árboles, apretamos los dientes.
Crecimos
dejando colgar los pies desde el rascacielos más alto
y parando la luna
y la ciudad
y los miedos,
y los deseos.